Algo que ya he dicho, y no me cansaré de repetir, es que ninguna proyección cartográfica es mejor o peor que las demás, todas son visiones artificiales basadas en ecuaciones y cada una es útil con según qué propósito. Si quieres ver la realidad te recomiendo que te hagas con un globo terráqueo, pero si aspiras a ver tu planeta, o incluso parte de él, sobre una superficie bidimensional ya te advierto que estarás viendo algo que, en parte, es engañoso.
El objetivo de esta entrada no es tratar el apasionante tema de las proyecciones cartogáficas aunque no está de más comprenderlas y saber que se suelen establecer clasificaciones entre las proyecciones en función de su principal propiedad; el tipo de superficie sobre la que se realiza la proyección, plano, cilindro o cono, así como también según la disposición relativa entre la superficie terrestre y la superficie de proyección. No voy a decir nada más (hay mucho escrito si os interesa el tema), solo que atendiendo a ello existen tres tipos de proyecciones: - proyecciones equidistantes, si conserva las distancias.
- proyecciones equivalentes, si conservan las superficies.
- proyecciones conformes, si conservan las formas (o, lo que es lo mismo, los ángulos).
Desgraciadamente no es posible tener las tres propiedades anteriores a la vez en el mismo plano, por lo que es necesario optar por soluciones de compromiso que dependerán de la utilidad a la que sea destinado el mapa.
Una muestra de cómo "engañan" los mapas globales es la siguiente imagen. En ella se muestra la distancia más larga que se puede navegar en linea recta, desde Pakistán hastaKamchatka. Son más de 32.000 kilómetros sin tener que mover el timón. Sobre un plano, muy recta no parece (alguno estará pensando muy acertadamente: ¡hombre claro, a mi no me la das con queso, si es sobre la superficie de la Tierra es una circunferencia!).
Dicho esto, está claro que la proyección cartográfica sobre plano es, y ha sido, crucial a lo largo de la historia. El mundo de hoy esta marcado por líneas trazadas sobre un papel y la historia no se puede entender sin los mapas. Eso sí, existen decenas de opciones para crear un mapa, y cada una de esas posibles proyecciones tiene sus pros y sus contras.
La Winkel-Tripel por ejemplo, está considerada la mejor proyección para representar el mundo entero, produciendo muy pequeños errores de distancia, pequeños errores de combinaciones de elipticidad y área, y menor asimetría estadística que cualquier otro mapa. Desde 1998 es la proyección estándar para los mapamundis hechos por la National Geographic Society. Laproyección acimutal de Lambert presenta como gran ventaja que las áreas representadas en los mapas no sufren deformación y son proporcionales a las formas originales, cumpliéndose la regla siguiente: "superficies iguales representan ángulos sólidos iguales". La proyección de Mollweide facilita la representación de toda la superficie terrestre con menos deformación en las áreas polares que la proyección cilíndrica y con gran fidelidad en las áreas cercanas al ecuador. Su principal desventaja es que las áreas cercanas a los bordes aparecen deformadas. La proyección usada por google, contra la que no tengo nada y es quizá la más conocida por todos, es la Mercator, que revolucionó la cartografía y fue muy útil para la navegación en el momento que fue creada.
Pero a pesar de ser la más extendida la proyección Mercator no es buena para comparar tamaños, sobre todo si los tamaños a comparar se encuentran en latitudes muy dispares. Un caso paradigmático es el de llevar Groenlandia hasta un lugar cercano al ecuador. Nadie ha encogido nada en la imagen siguiente, la extensión de Groenlandia se ha mantenido, solo que adquiere un tamaño diferente según la zona del plano sobre la que la representemos. Aquí sobre Australia, por ejemplo.
Esta fue la primera versión de la carátula de la película Cariño, he encogido a los niños.
Cuanta mayor sea la latitud a la que se encuentra más grande parecerá un territorio, luego territorios muy cerca o sobre el ecuador dan la sensación de ser menores de lo que son. Fíjate en el tamaño de Brasil al superponerlo con Europa o Norteamérica.
Brasil superpuesto sobre Europa (y África). De Libia a Islandia pasando por Moscú.
Brasil superpuesto sobre Norteamérica. Descontando Alaska sería mayor que EEUU.
Podemos hacer el viaje en sentido contrario y llevar un país europeo, en este caso Alemania, hasta Sudamérica. El tamaño de la potencia económica centroeuropea en este contexto puede sorprender a más de uno.
La provincia de Buenos Aires es solamente 50.000 km² menor que Alemania. Eso sí, en población golea Alemania.
Veamos el caso de Chile, que con su singular geografía podría conectar Túnez, casi casi, con el archipiélago Svalbard. Y si te apetece, podés comparar Argentina (y sí, así se vería si estuviese a la latitud de Canadá, la deformación que se ve es debida a la proyección utilizada).
No me quiero imaginar el precio a pagar en una autopista de peaje chilena para ver el país "de arriba a abajo".
Colombia con sus 1.138.910 km² sería, de largo, el mayor país de Europa por extensión (si no entrase Rusia en la lista, claro). Perú estaría ligeramente por encima. Por no hablar de La India o Australia.
Colombia superpuesto sobre la península ibérica.
Perú, nuevo megaestado europeo.
El tamaño de la India es de 3,3 millones de km². La UE tiene 4,3 millones. Australia 7,7.
Otros países,en cambio, son realmente pequeños. La Ciudad del Vaticano es el estado de menor extensión del planeta. Como puedes ver a continuación es sensiblemente menor que el Parque del Retiro de Madrid, que a su vez es sensiblemente menor que el neoyorkino Central Park. Ya sé que esto se puede ver en cifras en la wikipedia por ejemplo, pero de la siguiente manera es más visual.
La Ciudad del Vaticano superpuesta sobre el Parque del Retiro de Madrid.
El Central Park de Nueva York en Madrid.
Y ya puestos podemos ir un poco más allá y comparar grandes extensiones históricas que en el pasado formaron un solo ente de alguna forma. Se me ocurre la Gran Colombia, el imperio mongol o el romano, que puedes ver a continuación.
Imperios de ayer y hoy superpuestos